Para qué se utiliza
Esta técnica se puede utiliza en diferentes situaciones del proceso de enseñanza:
- Como actividad introductoria, para contextualizar un problema o situación.
- Como actividad de asimilación y refuerzo. Las historias pueden diseñarse en función de las motivaciones del alumnado para captar su atención y facilitar su comprensión. Se evita la memorización en favor de la asimilación.
- Como herramienta de aprendizaje significativo, puesto que el alumno aprende a partir del relato de experiencias análogas que le resultan familiares y motivadoras.
- Como herramienta para el aprendizaje por descubrimiento donde el alumno intenta adivinar lo que va a suceder en la historia a partir del análisis de las situaciones que en ella se dan.
- Como herramienta para fomentar el desarrollo creativo. Actualmente, está adquiriendo mucha importancia dentro del proceso creativo, el enfoque de “diseño orientado al usuario”. Cuando se diseña un producto es importante identificar cuán útil puede ser para la persona que lo va a utilizar. La narración de historias permite al diseñador ponerse en la piel de la persona que lo va a utilizar e identificar qué mejoras introducir al producto.